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jueves, 15 de octubre de 2015

Prometeo. Franz Kafka

De Prometeo nos hablan cuatro leyendas.

Según la primera, lo amarraron al Cáucaso por haber dado a conocer a los hombres los secretos divinos, y los dioses enviaron numerosas águilas a devorar su hígado, en continua renovación.

De acuerdo con la segunda, Prometeo, deshecho por el dolor que le producían los picos desgarradores, se fue empotrando en la roca hasta llegar a fundirse con ella.

Conforme a la tercera, su traición pasó al olvido con el correr de los siglos. Los dioses lo olvidaron, las águilas, lo olvidaron, él mismo se olvidó.

Con arreglo a la cuarta, todos se aburrieron de esa historia absurda. Se aburrieron los dioses, se aburrieron las águilas y la herida se cerró de tedio.

Solo permaneció el inexplicable peñasco.

La leyenda pretende descifrar lo indescifrable.

Como surgida de una verdad, tiene que remontarse a lo indescifrable.

FIN

domingo, 12 de octubre de 2014

MiTOLOGÍA PARA NIÑOS: Prometeo, el creador y maestro de los hombres

Según los primeros griegos, el hombre fue creado por Zeus y Prometeo, pero ambos tenían una visión diferente del papel que debían tener éstos en el mundo. Mientras que Zeus estaba encantado con el carácter primitivo que tenían estos primeros seres, Prometeo en cambio, un ser justo, inteligente y educado, amaba al género humano y deseaba que los hombres progresaran y sabía que con su ayuda lo conseguirían. Por ello la actitud de Zeus, negándose a favorecer el desarrollo de la raza humana por miedo a que algún día pudiesen rivalizar con él, le parecía absolutamente deleznable. Si él y Zeus habían creado a la raza humana debían acabar su trabajo. No habían creado a unos simples animales, por lo que debían enseñarles y educarles para que pudiesen evolucionar. Un día, armándose de valor, le dijo a Zeus:
-Hay que enseñarles el secreto del fuego, sino jamás conseguirán ser nada diferentes a niños inermes. Debemos acabar lo que hemos comenzado. LEER MÁS
Fuente: Cuentos de boca