Si se cuentan por miles las personas que pagan por conocer las andanzas de un canalla treintañero vestido de magnate en su proceso de seducción a una joven recién licenciada y sin experiencia sexual que cree en el ‘amor verdadero’, hay que preguntarse cuál es la razón. Pero si se tiene en cuenta que buena parte de esas miles de personas que devoraron los libros y acudieron en masa al estreno de Cincuenta sombras de Grey eran mujeres, hay que analizarlo con mucha más exhaustividad. ¿Por qué siguen atrayendo las relaciones de poder, en las que se reproducen patrones sexistas contra los que se lucha desde hace años? Porque seguimos inmersas en una sociedad que no solo transige, sino que fomenta la idea romántica de que el amor puede transformar a la persona y convertir a la bestia o al sapo en ese príncipe de cuento que completa a su amada.
Así lo afirmó ayer la psicóloga vasca Ianire Estébanez, en una de las ponencias incluidas en las jornadas ‘Abordaje integral de la violencia de género: desde la prevención a la intervención’, CONTINUAR LEYENDO
Fuente: Diario de Burgos
I love this film
ResponderEliminarnha xinh
biet thu dep
tu bep gia re